Dijo que es
un mandato de Dios predicar las palabras con el ejemplo como es el caso de
recatar a las personas que se encuentran perdidas, como hizo nuestro señor Jesucristo
que no vino a buscar gente sata sino a pecadores para honra y la gloria de Dios.
Por su
partes los miembros de la juntas de vecinos manifestaron su temor, por la
clases de jóvenes que viven, en una casa sin reunir las condiciones apropiadas,
para tener un programa de esa naturaleza, debido a que
los niños y las niñas tienen que pasar todos los días frente a esa casa, donde
hay jóvenes recluido que son drogadictos,
violadores y atracadores, razón suficiente para temer que puedan hacer fechoría
en dicho barrio.